Hostelería Low Cost, bajo coste, mas por menos. Muchos lo intentan pero pocos consiguen dar con la fórmula mágica que haga perdurar en el tiempo estos negocios:
«La teoría es sencilla vender mucho a márgenes reducidos»
Los problemas comienzan cuando nos dejamos llevar por la marea y acabamos regalando el producto y nuestro trabajo a los clientes, al tercer mes tenemos muchos clientes contentos y nuestros proveedores en la puerta reclamando facturas, para ilustrar este comentario puedo narrar lo que me sucedió hace un par de años en un restaurante cerca de Zaragoza.
La cuestión es que se abre un restaurante (cerrado hacia varios años) y comienzar a dar menús de una calidad excepcional a 6€, incluyendo bebidas y café (exito total, cada día lleno hasta la bandera) el remate se produce para Santa Águeda vamos un grupo de amigos y por 20€ comimos lo siguiente:
- Entrante Ensalada templada de gambas con piñones , pasas y rulo de cabra,
- Primero: Parrillada de Marisco (incluyendo un bogavante, y todo tipo de bichos),
- Segundo: Jarrete de Ternasco Asado con patatas a lo pobre,
- Por supuesto, postre, café y copa.
Esta fué la última cena del restaurante que cerró al día siguiente, por supuesto sin pagar a ningún proveedor y llevándose toda la maquinaria y mobiliario del local.
Esto no significa que no puedan hacerse bien las cosas, mejorando las compras, utilizando productos de temporada de bajo coste pero sabrosos y apetitosos. Actualmente hay franquicias que consiguen realizar una economía de escala y repercutir en sus clientes los bajos costes.
Como ejemplo pondríamos la cadena «CIEN MONTADITOS» – La gracia del asunto es «LLENAR LA TRIPA» con mucho pan y poco producto y un fantástico acuerdo con una cervecera para poder servir una jarra de cerveza a 1€ – «CALIDAD» mas bien baja pero «BARATO» y lleno de juventud.
A esta guerra se ha sumado «LIZARRAN», con cañas a 70 Céntimos y Tapas a 1 €, por lo que la mediana edad también se apunta a la moda. En los últimos meses también han surgido multitud de propuestas con botellines a 1 € o como la «SUREÑA» cinco botellines «Tres Euros».
La cuestión es hasta donde llega el margen para bajar los precios y si merece la pena apuntarse al «CARRO», varias franquicias se dedican a reconvertir restaurantes «De dudosa rentabilidad» en exitosos negocios «LOW COST» y con un coste muy bajo, la andaluza Low Cost ofrece convertir tu restaurante por 3000 € en una auténtica y «BARATA» taberna «ANDALUZA».
Y hasta los blogueros se apuntan a la moda, por doquier encontramos «Ruta low cost por xxxx ciudad», «10 Bares Low Cost en xxx ciudad»; etc…
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